Escribir
para que otras personas te oigan significa escribir utilizando palabras que la
gente escuchará pero no podrá leer. Por ejemplo, cuando escribes guiones para
la radio o para un comercial, o cuando escribes una presentación oral para leer
en una clase.
Al
escribir algo que otros oirán, debes recordar algunos puntos importantes: ¡Los
auditores no tienen una segunda oportunidad para oírte! Los lectores que no
entienden algo de lo que están leyendo pueden volver al inicio y leerlo otra
vez. Pero los auditores no pueden hacer lo mismo, deben entender tus palabras
la primera vez que las dices, ¡O tu mensaje se perderá en el aire!
Si
quieres escribir un guión de radio, puedes prestar atención a estos
consejillos:
Consejo
Nº 1: Escribe como hablas
En
realidad, “casi” como hablas y cuidando que sea un lenguaje apropiado. Oye a
los anunciantes y locutores de radio y televisión y notarás que los mejores son
los que parecen tan naturales como si estuvieran hablando contigo, no leyéndote
sus guiones.
Entonces,
si escribes algo que cuando recitas en voz alta suena como si lo estuvieras
leyendo, eso no es correcto.
Por
ejemplo, lee estas dos frases en voz alta. ¿Cuál de ellas te suena mejor, como
si una persona simplemente estuviera hablando?
- En la
escuela los niños pueden adquirir conocimiento sobre el medio ambiente.
- Los
niños pueden aprender sobre el medio ambiente en la escuela.
La
segunda es la más adecuada para un guión de radio.
Consejo
Nº 2: Escribe oraciones cortas
Es mejor
escribir dos oraciones simples que una larga y más compleja. Es difícil para
los auditores recordar al final de una frase larga lo que habías dicho al
principio.
Por
ejemplo, esta es una oración muy larga para oír, seguida de otra que está mejor
escrita y da la misma información al oyente haciéndola solo en cuatro oraciones
cortas.
Mi
abuela, que se fue a América cuando era niña, me ha contado ayer que aún se
acuerda de la primera vez que vio la Plaza Mayor, que la hizo llorar, pero no
estoy muy seguro por qué.
Esta es
una mejor manera de escribir la misma información para el oyente, haciéndolo en
cuatro frases cortas:
Mi abuela
se fue a América cuando era niña. Ayer me ha contado que aún se acuerda de la
primera vez que vio la Plaza Mayor. Ella me dijo que la hizo llorar. Pero no
estoy muy seguro por qué.
Consejo
Nº 3: No utilices palabras largas cuando las cortas serían igual
Es bueno
que sigas aprendiendo palabras nuevas y ampliando tu vocabulario. Pero en este
caso, es más claro para los auditores si usas palabras simples y dejas las más
difíciles para cuando hagas una presentación escrita. Por ejemplo, suena mejor
decir:
- Javier
manifestó que le gusta mucho el chocolate.
- Javier
dijo que le gusta mucho el chocolate.
En la
frase, la forma “dijo” que le gusta mucho el chocolate funciona tan bien como
la palabra larga “manifestó”.
Consejo
Nº 4: Usa la forma activa de los verbos
En la
lengua española existe la forma activa y pasiva de los verbos. El activo es más
adecuado para los auditores, es más claro, más directo, y más fácil de entender.
Por
ejemplo, una frase con verbo pasivo:
- Mi
clase fue visitada por el director de la escuela.
¿Quién
hizo la acción? El director de la escuela. ¿Qué hizo? Visitó. ¿Qué visitó? La
clase.
Pero
sería mucho más simple para un auditor si se lo dijeras más directamente:
- El
director de la escuela visitó mi clase.
Es una
oración corta y directa. Visitó es un verbo en forma activa.
Consejo
Nº 5: Ten cuidado con los “sonidos similares”
Son
aquellas palabras que los lectores pueden diferenciar al leer pero los
auditores podrían confundirse. Tu escrito puede estar bien en papel pero sonar
mal en la radio.
Consejo
Nº 6: Lee lo que has escrito en voz alta
Es la
única manera de oír cómo suenan tus palabras. Cuando lees en voz alta, puedes
oír
los problemas que tus ojos no notarán al leer, como frases que son demasiado largas, o
trabalenguas (palabras con sonidos difíciles de pronunciar).
los problemas que tus ojos no notarán al leer, como frases que son demasiado largas, o
trabalenguas (palabras con sonidos difíciles de pronunciar).
Este es
un ejemplo de trabalenguas:
- Rápido
ruedan las ruedas.
Otras
veces sin darte cuenta puedes escribir palabras que finalizan de la misma
manera
y producen el efecto de rima que suena mal al oído. Debes evitar frases que suenen como
ésta:
y producen el efecto de rima que suena mal al oído. Debes evitar frases que suenen como
ésta:
- En
medio del evento, se escucharon palabras de lamento, por el mal juego de un
equipo lento.
Consejo
Nº 7: Resalta lo más importante de tu guión.
En cada
frase que escribas, habrá algunas palabras que quieras destacar diciéndolas más
alto o con más energía. Así, los actores o el locutor profesionales que leerán
tu guión de radio se acordarán de enfatizarlas al momento de decirlas. Y
también hacen otro tipo de señales en el escrito para recordar cuando quieren
hacer una pausa, o donde creen que necesitarán respira
espero que les agrade
ResponderEliminarme parese muy bueno ya
ResponderEliminarque es una forma muy agradable
pork me ayudo a hacer un
trabajo
gracias ♥